Cuento para los ahijados

 Había que inventarse un cuento en el que tu ahijado sea el protagonista, tienes que definirlo un poco, como si fuese el protagonista de un cuento, que siempre lo definen un poco, y despues te inventas una historia que tu creas que le va a gustar

 EL CRICO DE ANGEL:

Habia una vez un gran Circo que era muy famoso porque tenia muchos animales y sobre todo muchas personas que trabajan como domadores, equilibristas, magos y famosos payasos. El Circo se llamaba CIRCO UNIVERSAL, y viajaba por todo el mundo. Habia un niño que trabaja en el circo pero limpiando las cuadras de los caballos y limpiando las habitaciones de los malabaristas y artistas.

El niño llamado Angel, estaba siempre triste porque él soñaba  con ser un gran domador de leones, tigres y tambien de hienas. Era muy dificil domar a esos peligrosos animales porque sabian que alguna vez se habian enfurecido y tenian muy mal genio.

Angel era un niño de siete años, con el pelo castaño de ojos marrones y con una sonrisa muy graciosa, era muy simpático y alegre. Vivia en el circo y sus padres eran malabaristas, pero él siempre despues de limpiar, iba corriendo a visitar a los leones y a los tigres, hablaba con ellos y estaba seguro de que esos animales lo entendian. Un dia , fue a visitar al león mas viejo de todos ellos, era el Rey de los leones, se llamaba  Duna, y en voz bajita se acercó y estuvo hablando un ratito con él. Alpasar por allli un domador, vió que el niño y Duna se miraban a los ojos y Duna se volvia más tranquilo y hacia lo que Angel le decia.   

El domador pensó que podria enseñar a Angel como ser un gran domador de Circo y le regaló al niño un traje de domador. ¡ Qué contento estaba Angel, era su gran sueño !  

Angel dejó de limpiar las cuadras y enseguida aprendió la profesión de domador y llegó a ser muy famoso. Toda la gente que visitaba el circo aplaudia cuando salia al escenario el gran domador ANGEL, que con tan sólo   siete años consiguió hacer su sueño realidad y que adoraba a los leones y a todos los animales del circo